¿Qué puedo hacer para evitar que mi hij@ desarrolle maloclusiones desde el primer minuto de vida?

Un destete temprano o una ausencia completa de lactancia puede estar causada por factores de insuficiente producción de leche materna, anatomía mamaria desfavorable, falta de interés  de la madre o problemas emocionales. En estos casos se introduce la alimentación con biberón, la cual satisface el hambre fisiológico, pero no la necesidad de succión, siendo compensado con hábitos de succión no nutritivos, como es el chupete o el dedo. Aunque el patrón de crecimiento y desarrollo de los huesos faciales también puede estar asociado a factores genéticos; los factores ambientales juegan un papel muy importante pudiendo afectar a este proceso, desembocando en una relación deficiente de los procesos maxilares y una alta prevalencia de maloclusión. Algunos ejemplos de estos hábitos son:  la alimentación con biberón, la succión digital, el uso del chupete, la respiración oral, el bruxismo y la pérdida prematura de dientes, pueden.

En la alimentación con biberón, los músculos pterigoideo y masetero se usan menos, pudiéndose  producir una atrofia por inactividad, ya que el músculo adquiere su forma completa cuando funciona correctamente. Además, debido a la posición que adquieren la lengua y los labios, aumentan las probabilidades de  desarrollo de maloclusión (mal alineamiento de los dientes o a la forma en que los dientes superiores e inferiores encajan entre sí) por la combinación de una compresión maxillar y una retrusión mandibular, dando lugar a un perfil más convexo. La mayoría de estudios demuestran que una duración demasiado corta de la lactancia, o la inexistencia de ésta, dan lugar al uso de más hábitos de succión no nutritiva (uso de chupete, chuparse el dedo..), alterando el equilibrio facial y dando lugar a maloclusiones, como la mordida abierta anterior y la mordida cruzada posterior en dentición temporal . Es por esto que se da importancia a fomentar la lactancia, ya que las necesidades psicológicas y afectivas del niño están más satisfechas, por tanto el niño está más calmado y es menos necesario el uso del chupete, la succión digital o de otros objetos.